Asúmelo, antes que nada. Da igual que en tu país seas un potentado que viaja en Ferrari o un estudiante que los últimos días del mes busca monedas de euros detrás del sofá para poder comprar macarrones. Has venido a un país en el que hay sueldos mensuales de 30 euros, y para los gambianos eres una hucha con patas. La diferencia de nivel de vida es tan enorme que te van a ofrecer todo tipo de ayuda y consejos, la mayor parte de las veces interesada. Una propina de 100 Dalasis (alrededor de 3 euros) puede ser el sueldo de tres días. Piensa en lo que sucedería en nuestro país si estuviera lleno de magnates del petróleo que te dieran 200 euros por indicarles una dirección...
Así que vas a recibir muchas invitaciones amistosas para enseñarte cosas, para llevarte a su casa, para mostrarte el camino, algunas de ellas bastante insistentes. ¿cuál es la regla? Si no estás interesado en lo que te ofrecen, sé tajante y no les des bola. Si accedes a que te muestren su casa o su "compound", estarán esperando alguna propina a cambio. Si eres mujer y no viajas acompañada con hombres probablemente recibas proposiciones sexuales bastante directas. Especialmente en la zona de Senegambia, en las playas cercanas a los grandes hoteles, es frecuente observar a señoras inglesas bien entraditas en años y en carnes, acompañadas de esculturales jovencitos gambianos (Bumpsters). Una cosa es que el amor sea ciego y otra bien distinta, que sea idiota…
Consejo del día: Trata de tener billetes pequeños para las propinas. Lo ideal, tener billetes de 10 Dalasi. Mejor 10 propinas de 10 Dalasi que una de 100….
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